GRACIA AMOR Y LIBERTAD. Jesús dijo, Y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres. CONOCER LA GRACIA, ES CONOCER EL AMOR DE DIOS Y LA VERDAD DE SU ESPIRITU. Porque de tal manera amo Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna. (Juan 3:16) La gracia es el espíritu de amor dado por Dios a la humanidad; en ella están presentes los sentidos de su Espíritu que traen sanidad a la mente, y el pensamiento Bíblico a la razón espiritual y mental del hombre que se encuentre favorecido en su interior, con los atributos de su amor y las riquezas de la gloria de Cristo, que entrañan en el hombre la capacidad de pensar en la instrucción divina de la reconciliación con la fe que, desde el principio existió en la mente del Altísimo Rey y Señor, creador de todas las cosas; porque todo lo que existe se hizo por su Espíritu, dado que, en él, mora la fe. El Espíritu del eterno es vida; y su vida tiene poder para derribar los lazos de inseguridad que afectan la vida racional del ser humano; no existente en la realidad de su paz, porque en el Espíritu del Altísimo habita la paz, presente en Jesucristo, creador fiel Hijo de Dios; Superior a Moisés, fiel siervo de la casa de Dios, porque toda casa es construida por alguno; pero el que construyo todas las cosas es Dios; pero Cristo como hijo sobre su casa, cuya casa somos nosotros, ayuda a retener firme su fe en todo hombre de buena voluntad, es decir, la buena voluntad, perfecta del Eterno y Altísimo Rey, permanece en Jesucristo, para perfeccionar al hombre, mujer, joven y niño; aquellos que responden a su llamado, para su restauración por gracia, a fin de, invalidar el pecado original y traer así la fe existencial en el cuerpo de Cristo, y el amor en su verdad con libertad de su Espíritu. Dios es bueno; en su bien actúa la alegría y el gozo de su santidad, en la resurrección que día a día genera en los redimidos por Jesús, cambios mentales; acordes a la buena voluntad de Dios, para que multitudes vengan al refugio de la naturaleza santa de su Espíritu y a la paz que genera, en tiempos de dificultad y difícil situación, crisis o hambruna. El eterno Rey llama a todos aquellos que han creído en el vínculo Santo de la razón que se adhiere a su buena, agradable y perfecta, voluntad, la cual es amplia para ayudar al hombre de fe que somete su voluntad a él, con el propósito de tomar mejores decisiones acordes a su bien espiritual, para darle el poder y bien eterno, en fidelidad y amor a Cristo. La voz de su Espíritu da libertad al cautivo para que pueda creer en la vida de Dios, que es en Cristo Jesús aquí en la tierra, y actúe perseverante en la instrucción para recibir el incentivo, favor del don de la gracia que habita en la paz, la fe y la vida del Espíritu eterno en Jesucristo. POR FAVOR DIFUNDIR ESTE MENSAJE CON RAPIDEZ....